En general, tener que preparar una evaluación no suele ser una tarea fácil. Entran en juego muchos factores, como la capacidad de aprendizaje y los nervios. Pero ¡no desesperes! En este artículo te contaremos cómo estudiar para un examen y veremos los mejores métodos para aprender. Sigue leyendo y pon en práctica estos consejos.
Antes de desarrollar técnicas para estudiar para un examen, es importante tener en cuenta los distintos métodos que se pueden incorporar al aprendizaje de una materia concreta.
Una de las claves más importantes para aprender una nueva asignatura es el tiempo. Por eso, si se planifica con antelación, se puede aprender de forma más eficiente.
A continuación te presentamos algunos de los métodos más eficaces para aprender mejor. Puedes probarlos poco a poco para incorporarlos a tu rutina de estudio.
Haz una primera lectura superficial
Una de las primeras cosas que debes hacer cuando te encuentras con un nuevo texto que quieres estudiar es hacer una primera lectura superficial. Esto te ayudará a entender la información de forma más general, ya que no tendrás que detenerte en los detalles. Intenta estar en un entorno libre de distracciones para poder concentrarte y absorber el contenido.
Comprender el texto
Tras la primera lectura, es el momento de profundizar en el texto. Aquí debes repasar los términos que no te queden claros y buscar información sobre los temas con los que no estés familiarizado. Una vez que hayas comprendido bien el tema, puedes anotar las ideas principales para ayudarte a entender el propósito del texto.
Enfoque del estudio
Una vez que tengas claros los conceptos y ya no necesites buscar información para entender el texto, es el momento de interiorizar los conceptos. En este caso, debes saber exactamente cuáles son los puntos principales del material. Lee tantas veces como sea necesario y subraya las ideas principales para centrarte en el estudio.
Resumir el material
Una vez estudiado el tema, hay que resumir el material. Se trata de crear una síntesis para que puedas explicar con tus propias palabras lo que has aprendido. Esto te ayudará a determinar si realmente has interiorizado y comprendido los conceptos.
Utiliza mapas conceptuales
Si te consideras una persona visual, crear diagramas o mapas conceptuales te ayudará a organizar la información más rápidamente. Con esta metodología, podrás organizar los conceptos según su significado. También te ayudará a repasar el tema y tener una visión general.